Bella, inteligente, noble, audaz y con una fortaleza de carácter que la hace única. Así es Keneska Lima, la joven que revivió el mercado automotriz venezolano, gracias a su impecable filosofía de trabajo: “A los clientes hay que respetarlos, para garantizarles un servicio ético y que llene sus expectativas”.
Keneska es una intrépida licenciada en Administración de Empresa, que no se dejó subestimar por ocupar un cargo que, hasta hace muy poco, estaba dominado por los hombres. Gracias a una impecable formación temprana con respecto a la venta de automóviles, Lima supo que quería dedicarse a elevar el nivel del mercadeo de carros en el país, y llevarlo a dimensiones que sólo los más aptos pueden alcanzar.
Con una sólida visión
Para esta singular mujer, su pasión por el ramo automotriz comenzó porque su madre era gerente de operaciones en un concesionario, y algunos fines de semana la acompañaba a su oficina. “Esa fue la semilla que años después germinó en mí. Sentí que podía hacer algo diferente y de mayor calidad de servicio en el ramo automotriz venezolano. Es por eso que muchas personas se sorprenden de cómo tengo tantos conocimientos con tan corta edad”, aseguró.
La joven que creó un imperio
Keneska nos comentó que siempre ha sido una mujer de retos; por lo cual supo que su camino debía ser paso a paso, de manera firme y segura. Comenzó como asesora de ventas independiente de vehículos. Sin embargo, sentía que se podían generar nuevas herramientas que impulsarían las ventas de ese rubro. “Vi en realidad la necesidad de buscar las mejores opciones para mis clientes y de cubrir sus necesidades, haciendo lo que me gusta y me apasiona. Tengo clientes de todo tipo; es decir, desde lo que buscan comprar su primer vehículo, hasta el que trabaja como yo en el ramo automotriz”, afirmó.
Más que una hermosa mujer
Keneska siempre ha sido blanco de comentarios en los cuales se alaba su innegable atractivo físico. Al respecto, ella explicó que es común que se le encasille como la típica niña que puede concursar en un certamen de belleza. Sin embargo, reconoció que la mayoría de los concesionarios están dirigidos por hombres, pero que cuando se tiene el respeto de las personas por tu profesionalismo y trayectoria, en este y en cualquier ramo, se rompe el paradigma dé si eso no es para mujeres o esto no es para hombres.
“El fracaso no existe”
Si inquebrantable determinación, la ha llevado a asegurar que para ella el fracaso no existe. “Comence con muchísimos nervios y dudas, pero sabes yo soy fiel creyente en Dios, y como creyente, sé que cada etapa de tu vida es una experiencia, siempre te traerá un aprendizaje y una razón de ser. Si Dios quiere que yo cierre mi ciclo en el ramo automotriz, así será; pero te puedo asegurar que en el ramo que él quiera que yo esté, con trabajo, esfuerzo, disciplina y de la mano de él, me posicionaré entre las mejores”, afirmó.
El secreto de las mujeres exitosas
Para esta excepcional jovencita, el ser una mujer exitosa es consecuencia de “tener un equilibrio en todos los aspectos. Sólo se logra con disciplina, visualizando y analizando todas las situaciones, fijándote objetivos claros. El éxito es un estado de ánimo. Siento felicidad y una gratitud enorme por todo lo que hago”, enfatizó.
De Venezuela para el mundo
Finalmente, Keneska Lima reflexionó acerca de la importancia de incentivar la inversión en Venezuela. “En el país existen muchas oportunidades para inversión. Creo firmemente en invertir en mi país. Nosotros somos bendecidos porque esa es nuestra herencia. Los venezolanos destacamos y hacemos lo mejor en todo lo que nos proponemos, como no invertir en un país que lo tiene todo”, concluyó.