En el competitivo universo de los negocios creativos, pocos casos resultan tan inspiradores como el de María Paula Casas. Migrante venezolana radicada en Miami, ha logrado, con esfuerzo propio y visión estratégica, abrirse paso en un mercado exigente, trabajando con marcas de alto rango como Nike, Givenchy, Crate & Barrel, Siclo, Istituto Marangoni, y también con iniciativas de bienestar, moda y filantropía como Better Me Movement, Capsool y Little Dreams Foundation. Al mismo tiempo, impulsa su propia marca de nutrición funcional, Plenah, y ha sido reconocida con el Mara de Oro Internacional por su impacto en responsabilidad social corporativa y marca personal.
María Paula, tu historia comienza con un cambio de país. ¿Qué significó para ti empezar de cero en Estados Unidos?
Llegar a Estados Unidos fue un desafío enorme. Migrar significó dejar atrás lo conocido y enfrentarme a un entorno competitivo donde nada estaba garantizado. No tenía contactos ni un camino asegurado, pero aposté por mi capacidad de crear y conectar. Cada proyecto que tomé, por pequeño que fuera, lo vi como una oportunidad para demostrar mi valor. Con el tiempo, esa constancia me permitió llegar a marcas globales y consolidarme en un mercado que admiro profundamente.
Has trabajado con marcas internacionales de gran prestigio. ¿Qué aprendizajes te han dejado esas colaboraciones?
Cada colaboración ha sido única, pero recuerdo con especial orgullo el evento que produje junto a Síclo, una marca internacional de fitness que confió en mí para diseñar una experiencia de alto nivel en Miami. El feedback que recibí de ellos no solo reflejó satisfacción estética, sino también reconocimiento profesional: destacaron cómo mi trabajo transformó la visión de la marca en un entorno tangible y emocionalmente resonante, logrando que los invitados se sintieran profundamente conectados con la propuesta de Síclo. Gracias a mi enfoque estratégico y creativo, el evento no solo cumplió con sus expectativas, sino que también fortaleció la reputación de la marca en Miami y abrió nuevas oportunidades de colaboración con líderes del sector. Este tipo de validación confirma que mi trabajo va más allá de lo visual; genera impacto, posiciona marcas y crea experiencias memorables y con propósito.
¿Hay alguna anécdota que refleje tu capacidad de resolver bajo presión?
Sí, en el evento de El Source con Alexa Store, el mismo día no llegaron unas copas que eran clave para la decoración. Tuve que improvisar y terminé transformando un par de ceniceros en piezas decorativas con frutas frescas. Fue un recordatorio de que la creatividad no solo está en la planeación previa, sino también en la capacidad de reaccionar en el momento para que la experiencia final no pierda impacto.
Tu marca Plenah ha sido otro gran pilar en tu recorrido. ¿Cómo nació y hacia dónde va?
Plenah comenzó con un simple deseo de educar a los demás sobre cómo tomar elecciones conscientes a la hora de comer y cómo habitar nuestros pensamientos de manera positiva. Ese propósito inicial terminó convirtiéndose en una línea de nut butters creadas en plena pandemia, en un contexto lleno de incertidumbre. Hoy, Plenah es mucho más de lo que soñé: tengo clientes recurrentes y marcas de prestigio que han querido integrar mis productos en sus propios proyectos. En cinco años me veo con Plenah posicionada en mercados y espacios wellness, expandiendo la nutrición funcional con diseño y propósito.
Por: María José Medina Torres
