Fiel a su compromiso con la conservación del medio ambiente, Coca-Cola impulsa y participa activa y permanentemente en programas dirigidos al reciclaje. En esta ocasión, a través de la campaña “Cada botella tiene una historia”, la compañía se enfoca en socializar todo lo que ocurre en el proceso que inicia con el desecho de una botella plástica y concluye con una nueva Coca-Cola.
A través de un observatorio móvil, Coca-Cola muestra un video en el que se explica el proceso de reciclaje al que son sometidas las botellas. De esta manera, se enfatiza nuevamente en el compromiso ambiental que tiene la marca, ya que al concluir, cada nueva botella de Coca-Cola está compuesta por un 25% de plástico reciclado. A partir de la campaña “Cada botella tiene una historia”, Coca-Cola se preocupa en contar qué ocurre con cada botella luego de que esta ya fue consumida y desechada.
Durante el mes de noviembre, el mapping ha recorrido varias universidades de Quito y Guayaquil. Así, se ha dado oportunidad a los jóvenes para que se familiaricen con el proceso y se sientan comprometidos a ser parte de éste. Además, para incentivar la inclusión de los universitarios, se entregaron premios a aquellos participantes que comprendieron el proceso de reciclaje e interactuaron con el equipo de Coca-Cola para poder explicarlo.