ARNAUD WINTER: Creador de una sinfonía de notas aromáticas para cada personalidad

Existen detalles que llaman la atención y que solo pueden percibirse mediante el olfato, como sucede con una fragancia. Se trata de un aroma que combina el atractivo y sensibilidad de quien la use, para llegar a convertirse en el complemento ideal de su personalidad.

Es indispensable que una fragancia se elabore con pasión, pues solo así llega a ser única, irrepetible e inolvidable. Y es que no hay nadie mejor que un perfumista para llevar a cabo la fusión perfecta de notas aromáticas que se infundan en estas obras de arte.

Pero, ¿Qué es un perfumista? Tal como un músico necesita buen oído y un pintor buen ojo, un perfumista necesita una buena nariz. De hecho, en el sector de fragancias se utiliza la palabra "Nariz" para describir su puesto. No se trata de una facultad especial, sino de un sentido entrenado que combinado con la experiencia, su memoria, imaginación, sensibilidad comercial y conocimientos de química, convierten a su propietario en la clave mágica de la fabricación de un perfume.

“La nariz” de Yanbal

Con más de 20 años de experiencia, el francés Arnaud Winter es una autoridad en el mundo de las fragancias, encontrándose entre las 10 mejores narices del mundo en un ranking de 200 perfumistas.

Con sus primeros pasos en Nueva York, recorrió el continente americano demostrando sus habilidades y profesionalismo, hasta ganarse el crédito de ser considerado una de las mejores narices de la actualidad.

Educado en el Instituto Superior Internacional de Perfumería, Cosmética y Aromas alimentarios de Versalles (ISIPCA), la única escuela de perfumistas en el mundo; Winter hace parte hoy del selecto grupo de perfumistas o narices de casa, aquellos que están a cargo de diseñar exclusivamente fragancias para una marca.

Arnaud hace lo suyo en Yanbal, donde llegó hace 20 años reclutado por el fundador de la compañía, para crear la línea de fragancias de un emporio que traería la filosofía del nuevo lujo y belleza femenina a Latinoamérica.

Es así que, para crear el alma de una fragancia, Arnaud se reúne con un exclusivo y talentoso equipo de perfumistas de talla mundial en los laboratorios del Centro de Investigación & Desarrollo de Yanbal, localizado en Ft. Lauderdale, Estados Unidos, para traducir las sensaciones en olores y con base en los más finos y exclusivos ingredientes de diferentes partes del mundo, lograr una esencia sofisticada, un aroma de lujo.

Inspiración de nuevas creaciones…

Este talentoso perfumista confiesa que la mujer ocupa en el arte un lugar único e inigualable. “Es una exquisita fuente de inspiración para más de un artista, que cae rendido ante su cautivante imagen”.

Por ello, junto al equipo de perfumistas de Yanbal, Arnaud ha trabajado durante años buscando los ingredientes ideales para crear un aroma floral memorable y cautivador, que haga sentir a la mujer muy especial, asegurando que muy pronto, la mujer ecuatoriana será testigo de una obra maestra en perfumería, una fragancia exclusiva y refinada, inspirada en la elegancia y delicadeza femenina.